Uber demuestra que no todo está inventado

Uber es la mejor respuesta a los que decían «todo está inventado». Por suerte para nosotros, todo puede ser reinventado…

A mi edad ya he cambiado 3 veces de «profesión» (u oficio).

Empecé en una redacción (en ABC de Sevilla). Dentro hubo que especializarse en maquetar, retocar fotos y hacer infografías. Incluso durante algunos años lideré la información agraria, lo que me sirvió para dirigir algunas publicaciones fuera de España (¡por suerte sabía inglés! Y cuando no sabía algo, ahí estaba Google).

Durante un tiempo esto pareció funcionar… Pero con la «democratización» de las herramientas y la crisis de la empresa informativa, hubo que ponerse las pilas para no caer bajo el tren.

Aprendimos a hacer webs estáticas y la cosa dio para otro empujoncito. Pero, claro, eso lo hacen los «robots» y asistentes de 1&1, Wix… así que hubo que retomar la programación web hace unos 15 años.

Las webs dinámicas dan de comer, pero ya poco puedes hacer si no son responsive y, dicho sea de paso, el cliente ya no te deja hacer lo que quieras. Tiene cultura, así que decide si quiere WordPress, Joomla, Magento, Prestashop…

Ahora, o aprendes a hacer aplicaciones móviles de principio a fin o no eres nadie en esto…

Y nada de “uno hace el diseño, el otro testea usabilidad, otro genera la estructura de datos, etcétera”. Eso era hace años. Ahora uno debe hacer, como mínimo, un buen prototipo usable.

Más dinero, más estudio…¡Más diversión!

En medio aprendimos animación 3D (allá por 2004 hasta di clases a unos 200 alumnos durante 3 cursos), edición de vídeo, utilizar cámaras, etcétera…

Y mientras uno tiene que gastarse al año un pastizal (y muchas horas) para mantenerse con los conocimientos actualizados, ve como los taxistas cortan Barcelona porque el futuro no es como se lo habían contado. En Berlín lo prohíben porque “es inseguro”. No hay vuelta atrás. Las prohibiciones acabarán y quedará el que mejor resuelva el problema al cliente. Es ley de vida.

Es lo que nos queda en todos los sectores. Lo automatizable será automatizado y, con el crecimiento de la Inteligencia Artificial, ya hay periódicos sustituyendo a personas por robots en agencias en EEUU (no me lo han contado, lo he vivido…).

Se prevé que en MENOS de 10 años un ordenador podrá ganar un Pulitzer por sí solo (bueno, con una buena conexión a Internet). Si no te lo crees aún o piensas que eso es imposible, es porque no sigues el hilo por el que va la inteligencia artificial. Redactan bien, rápido, sin faltas de ortografía y no dan nada por cierto sin confirmar. ¡Qué mejor que una máquina para hacer periodismo modular basado en fact-check!

¿Os acordáis de aquello de “programa o sé programado”? Pues ahora es más verdad que nunca.

Se necesitan universitarios, claro que sí, pero ya una carrera no es suficiente. Ni un master, un idioma… ¡La actitud y la creatividad te llevarán muy lejos! Y eso no lo enseñan en la universidad. A veces, ni siquiera lo promueven en casa los padres.

Sé creativo, proactivo, curioso y no te creas eso de “todo el mundo tiene que ser emprendedor”. Si todo el mundo es emprendedor se acaban las empresas. Paradójico.

Las empresas necesitamos buenos trabajadores por cuenta ajena. Quizás con un punto fuerte de “intrapreneur”, que nos aporten nuevas ideas, soluciones, esfuerzo y, sobre todo, una gran sonrisa y mucha actitud. Es lo que nos diferenciará en un mundo donde saldrán 1.000 Ubers más en los próximos 5 años.

Y solo hay una verdad: si crees que no le va a tocar a tu sector, te equivocas.